Es una epístola escrita por un
tripulante de una nave espacial con destino a la tierra. La misiva dice: “Amada mía, aprestamos el regreso y ya deseo tenerte en
mis brazos y sentir nuevamente cómo palpita tu corazón junto al mío.
Después de este aterrizaje no habrá
nuevas despedidas. El A. SL-4 ya no
entrará en órbita, ha cumplido su misión. Ya no tendrás que alistar mis
alforjas ni ocultar tus lágrimas ni me pedirás que te deje mi aliento ni que te
lleve en el corazón. Muy pronto abandonaré esta nave, te abrazaré y estaremos
juntos para siempre. Renovaremos nuestro amor y haremos una nueva boda, la más
bella de la historia.
Ya sabes, amada mía, en este
circuito se vive el tiempo en sincronía y hacemos fiestas con cada capsula de
vitaminas y minerales. Aquí las escenas cotidianas se entremezclan con la
trayectoria de otras naves que surcan las galaxias. Todo es monótono y hasta
tocar las estrellas con las manos es tan pueril sin el encanto de una silueta
femenina, la tuya. Alguna vez te mencioné la vida en esta tienda metálica, sólo
hay olor a hombres narcisos. Aquí se rozan personalidades como astrónomos, ingenieros,
matemáticos, físicos, químicos, filósofos, magos, consejeros; todos colaboran
con la historia del mundo poniendo de relieve lo novedoso para la humanidad,
pero también se mecen el poder, la codicia, el egoísmo y la ciencia que buscan
privilegios y dominio sobre los demás y hasta persiguen otros objetivos que
ponen en peligro los fines de la nave. Los consejeros confortan a los
infortunados compañeros y tratan de hacerles más tolerable la interminable
travesía.
Ahora mientras te escribo; los
cronistas ajustan los episodios finales del viaje, otros que en turno manejan
la cabina, la bodega, el laboratorio y los motores principales hasta se dan un
tiempo de una partida de ajedrez, son los inquietos que se resisten a sufrir el
estancamiento de la mente; otros leen, son los que piensan e idean cómo
sostener el equilibrio del universo; otros escriben, son los que ajustan y
regulan las leyes de la dinámica y de las fuerzas; otros fotografían las
galaxias vecinas y predicen lo que tal vez podía ocurrir en el futuro. Sí, el
futuro que va de segundo en segundo.
Amada mía, la luz roja nos
alerta, entramos en un inexorable itinerario perdido….Te amo!”……
(Spatial missión Skylab, Apolo
SL-4. 13.09.1973.21:45:09. SAP.Etdp0004296654/nstjh…..)
Cuerpos petrificados fueron
encontrados junto a una gran fosa abierta por un impacto raro en el casco de
una duna rodeado de fragmentos sólidos, trozos metálicos de titanio, acero,
berilio y otros…. y un tablero rojo incandescente que reproducía un mensaje
escrito en clave.
Los agentes de la NASA
descifraron; la epístola tenía el código secreto del Teniente Arnold Zacthin.
Rápidamente todo fue retirado del escenario y nunca más se habló de lo que ocurrió
con la nave errante que cruzó la atmósfera terrestre y tuvo un aterrizaje
desacertado en las proximidades del desierto del Sahara.
Wow, me ha encantado. Ficción mezclada con historia, creo, pero de alto nivel. :-) La última línea de la primera parte me ha cautivado y me ha dado ideas jaja.
ResponderEliminarBuena idea, hay más ficción que historia. La NASA no comparte sus secretos, solo da aquello que conviene a su política.
EliminarHas plasmado con gran imaginación y maestría un relato nada fácil de escribir.
ResponderEliminarAdemás es un relato muy diferente a otros tuyos. Fantástico, geminiss.
Feliz finde y un fuerte abrazo.
Me gusta que te haya gustado. Como ficción no es tan descabellada, eso al menos creo.
EliminarIgual para ti un buen weekend,
besos
Querida Genessis, me ha gustado mucho la combinación tecnológica, romántica y política que has sabido sintetizar en tu relato. Me han gustado además los detalles precisos y los toques difusos que dan marco a la historia. La caída en un paisaje desolado, los asombrados testigos y la precisión del rescate. El último viaje de una nave y de muchas personas, una realmente enamorada, al menos.
ResponderEliminarHermoso relato, querida amiga. Un beso muy grande.
Hasta leerte ahora no me había dado cuenta de la combinación o detalles precisos que había hecho, más bien, de los toques difusos, ya que un simple lector de estas cuestiones de las naves puede ver un escrito descabellado, pero este supuesto episodio es una simple ficción. Que tú valores ya es todo el logro que podía esperar.
EliminarOtro beso para ti mi querido amigo y
buen fin de semana.
Menudo relato, me ha gustado mucho.
ResponderEliminarUn beso!
Gracias Ainoa!
EliminarUn saludo cálido va para ti.
Mientras atentamente me dejaba llevar por el sendero de tus letras, acudieron a mi mente varios casos conocidos de trágicos vuelos tripulados en misiones espaciales, como fue lo que pasó a los cosmonáutas soviéticos de la Soyuz XI, a los que encontraron muertos dentro de la cápsula espacial pero con una amplia y misteriosa sonrisa en sus rostros. Sé que esto no tiene nada que ver con tu relato, pero me vino a la mente que quizás al saber que su muerte era irremediable, una carta de sincero encuentro con el amor que les esperaba, como tú relatas tan bellamente, les dio la esperanza necesaria para poder esbozar una última sonrisa antes del final.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho amiga tu relato. Un abrazo.
Gracias Jorge, tú siempre muy gentil conmigo.
EliminarLa verdad que hay muchas historias verídicas de las naves tripuladas, no solo norteamericanas y soviéticas, las que tienen en su haber más viajes, sino también otros países últimamente, algunos con resultados favorables, es decir, que sus tripulantes regresaron a tierra, y otros con consecuencias fatales, pero yo no me animo a escribir cosas históricas y reales, porque desconozco ese ámbito, y era mejor hacer una ficción.
Un abrazo de sábado va para ti querido Jorge
y feliz domingo.
Hola queridos, buen domingo para ti. ¡hola
ResponderEliminarGrazie mille Rosetta,
EliminarSei un tesoro,
buona domenica.
Un abbraccio.
Gracias Alejandro.
ResponderEliminarA veces no es fácil estar solo ni en el cielo ni en la tierra...
Buen domingo.
Guau!! Que relato, me encantó. Lo lei de un tiró. Me lo creí, bueno quien sabe, si pasó como lo narras.
ResponderEliminarUn abraXo!
Quien sabe cuántas cartas y noticias guardadas ha recopilado la NASA. Ese es un poder político y económico muy cerrado, sólo dan a conocer aquello que les conviene para su futuro.
EliminarUn abrazo de domingo querida Marilyn.
Bienvenido Ezequiel,
ResponderEliminargracias por tu visita y tus palabras,
ya iré a visitarte. Me parece sumamente interesante los temas que te propones intercambiar con los bloggers.
Ya verás todo corre normalmente. Adelante!!
Un abrazo
y feliz domingo.
De todo tu escrito me quedo con la frase de amada mia, ya que yo quisiera que alguien me lo dijera alguna vez de verdad.
ResponderEliminarMe gusta lo que haces.
mi blog es:
elblogdemaku.blogspot.com
si te gusta podemos seguirnos.
Un saludo
Querida Inma, el amor llegará cuando menos lo busques.
EliminarLlegará....
te deseo o mejor!
Saludos.
Me parece muy interesante tu blog.. por aquí andaremos
ResponderEliminarSaludos!
Gracias!
EliminarSerás siempre bienvenido/a a este espacio.
Saludos cordiales.
Me ha gustado Genessis. Me ha echo recordar mi primer viaje espacial ;)
ResponderEliminarCreo que no les ha pasado nada, que el mago ese que estaba en la tripulación los ha salvado a todos, ¿verdad?
Besos
Aquel viaje y aterrizaje inolvidable!!! Claro, no ha pasado nada, estuve yo también, y desde entonces nos conocimos.......
EliminarUn abrazo de lunes.
Yo creo que le dio tiempo a hacer la carta en los momentos previos a su destrucción, era como si al escribirlo se lo pudiera transmitir de alguna manera. Si lo recogió la Nasa ella nunca lo sabrá, pero al menos tu le has dado una oportunidad.
ResponderEliminarSiento llegar el último, he estado un poco liado pero como soy un goloso he llegado a los postres, jajajajajaj
un besote grande para empezar la semana.
Cuidate, näkemiin
Cuántos secretos tendrá guardado la Nasa. Cuántas bellas historias y otras tan trágicas se podían contar...pero lo que más se difunde es el "éxito" de la misión.
EliminarEn ser golosos nos parecemos....jajaja
Saludos de martes.
Gracias Carla, eres muy amable.
ResponderEliminarYa te escribiré.
Saludos cordiales.
Genessis:
ResponderEliminarAl leer tu post, vinieron a mi memoria las épocas de los libros de ciencia ficción, Asimov, los autores rusos, Bradbury...
El cuento tiene algo de Solaris, aquella película donde el astronauta soñaba a su amada, que se materializaba. Lo digo, no tanto por su parte argumental, sino por la similitud por el enfoque afectivo del astronauta.
Es imposible saber los pensamientos de los infortunados que regresaban a la Tierra y no lo hicieron como se esperaba: los rusos de la Soyuz IX, Komarov o los tripulantes del Columbia.
Respecto a la censura de la NASA es tan conocida como los nombres de los astronautas.
No te tenía por escritora (o previa lectora) de cuentos de este tipo, lo que me sorprendió gratamente.
Un gran abrazo.
Gracias por la palabra escritora que me queda bastante grande, pero como viene de ti la acepto. En esto de las misiones espaciales hay historias reales bastante interesantes, sea por los logros positivos obtenidos y otros tantos por los trágicos resultados, y detrás de cada uno de ellos habrá todo un volumen por escribir, pero lo mio es apenas una breve ficción.
EliminarQue tengas un buen día.
Abrazos.
Hola, querida genessis:Veo que nada te acobarda. Te enfrentas a toda clase de género: ensayo, relato, poema, reflexiones... Y lo consigues maravillosamente.
ResponderEliminarEn este me has hecho pensar en lo que debieron sentir muchos astronáutas rusos y a americanos, cuyas operaciones espaciales fracasaron. Seguramente hubo intercambio de palabras y mensajes entre ellos y las bases de lanzamiento; pero sus gobiernos la mantuvieron en secreto. Recurrdo que cuando vi las imágenes de un monito dentro de una nave rusa me pregunté qué sentiría ese noble animal al comprender la crueldad que el Hombre estaba cometiendo con él.Estoy seguro que él sabía que jamás regresaría vivo. En fin... Me has regalado unos minutos de lectura muy gratos. Besos
Holaaa Juancito!!!
EliminarDicen en uno de mis países del sur, que el tonto no sabe con quien se enfrenta... y esa sería la explicación, pero en fin, también encuentro alguien que me dice que lo consigo maravillosamente...ese Gracias es para ti.
Ya estuve hurgando por tu álbum de fotos y me quedé encantada. Creo que algún día iré a conocer y si no, será un sobrevuelo antes de internarme en el valle de Josafat.
Abrazos Juan.
Hola Genessis, gracias por tu bienvenida en mi blog, yo también te extrañaba.
ResponderEliminarImpresionante historia de ficción que la haces tan real que uno se siente en aquella nave, expectante mientras escriben ese mensaje a descifrar.
Permiteme el atrevimiento de descifrar ese mensaje como yo lo interpreto:
" No es necesario irse tan lejos para aprender a valorar lo que tenemos tan cerca"
Un abrazo enorme
Amparo, la vida tiene otro sabor cuando llega una amiga, eso es contigo.
EliminarSí, a veces vivimos tan inmersos con los que tenemos cerca y casi sin darnos cuenta lo dejamos fuera, pero cuando se suman las distancias conocemos y añoramos el valor real que tiene.
Un beso amiga.
Muy buen relato Genessis. Me ha encantado :) , algo distinto a lo que sueles escribir, pero al final todas las historias y relatos hablan de lo mismo que ha estado preocupando, o disfrutando la humanidad desde siempre.
ResponderEliminarEse bello amor roto, un mensaje que nunca llegará a su destino supongo, junto con la ocultación y desaparición de algo tan hermoso, queda la explicación oficial manipulada. Es triste pensar en la ocultación de datos y costes humanos que nunca conoceremos sobre la carrera espacial, tanto de Nasa, como la RKA-FKA (agencia espacial rusa) o cualquier otra agencia espacial del mundo.
El relato me recuerda tristemente aquel fracaso del Challenger, también mas reciente la del Columbia con la perdida total de ambas tripulaciones.
Me ha gustado mucho leer un relato así de tu mano genessis, espero alguno más :). Un besazo.
Querido Oscar, tus comentarios siempre me aportan más datos y justo aquello que seguro necesitaba y no lo tuve, por eso te agradezco y espero que siempre vengas, ya ves que este post no lo he reemplazado antes de que tú vinieras....
EliminarEncantada que te haya gustado.
Un gran beso para ti.
HOLA GENESSIS
ResponderEliminarEXCELENTE RELATO AMIGA MIA.
UN DESTINO PUEDE CAMBIAR DE REPENTE...ES IMPRESIONANTE PENSAR EN ESOS MENSAJES, EN ESOS AMORES QUE QUEDAN SE QUEDAN SIN UN MAÑANA...
PRECIOSO TE FELICITO.
UN BESO GRANDE.
Parece ser que a veces los destinos de algunos están en las manos de otros...y los caminos del amor no llegan a su fin...
EliminarGracias Luján por tu vista y palabras.
Un beso.