Es paciente y siempre se manifiesta con ánimo equilibrado. Por consiguiente, desarrolla la disposición para agradar y complacer en justa medida a los demás, en todo momento y sin nada a cambio. La bondad engendra la caridad.
La bondad perfecciona a la persona porque sabe dar y darse sin temor a verse defraudado, sabe transmitir aliento y entusiasmo a quienes lo rodean.
Es loable encontrar un ser bondadoso que transmite su bondad interior; se intuye a través de sus palabras, ideas, gestos y acciones.
imagen de la red |
No hay comentarios:
Publicar un comentario