Genessis comparte con los que generosamente se asoman a este sencillo portal los momentos de ocio que la vida le regala. Es una miscelánea de cosas simples; pensamientos y poemas, fantasías y pasiones, recuerdos y plegarias, vivencias e impresiones, que se plasma en el reverso de una página compartida con los lectores.
Genessis y sus avatares semejan escenarios de un alegórico estreno de un destino que va usurpando la vida en un tiempo prestado.


lunes, 19 de marzo de 2012

la herencia

Imagen tomada de la red
Después de la muerte de mi abuelo Tomás, todos los hijos y un señor sumamente culto al que llamábamos Doctor Cáceres se reunían frecuentemente en la vieja casona de Costa Alegre.

Los niños quedábamos dentro de la casa fuera del alcance de las conversaciones de los adultos.

Sólo ellos entendían el lenguaje, la magnitud de la disputa en que se careaban la repartición de la herencia del abuelo y cómo sacar la mejor tajada de propiedad que impuso para sí el abogado como pago del trabajo de Sucesión.

A veces se escuchaba el sollozo de una de las tías.

Aquellas asambleas familiares para mí eran las más incomprensibles y dolorosas a la vez.

No sabía la trama real del tema y ni era bueno saberlo en ese momento, pero en mi vaga imaginación de niña suponía que discutían cómo conseguir aviones, grandes y seguros, para escaparnos cuando llegara el fin del mundo.

foto tomada de internet

No hay comentarios:

Publicar un comentario