No es desencanto. Es una realidad que me incluye a mí. Todos somos locos y cuerdos a la vez, casi todos...
Cambiantes. Inconsistentes.
Nadie está tan repleto de perfecciones como para decir “yo no soy así”, "yo no beberé de esta agua".
Llevamos un instinto esquivo que busca ocultar los reveses de nuestra mezquina lucidez. Pero, siempre hay una pequeña razón en cada gesto de locura que defendemos a ultranza, y en cada circunstancia nos presentamos íntegros, corteses y hasta felices frente a los demás.
Ciertamente todos tenemos esa parte de locura, de incoherencía interna que nos hace justificar nuestros mas irracionales e inconsistentes actos y pensamientos. Y aún así vemos antes estas inclinaciones en los demás que en nosotros mismos.
ResponderEliminarUn saludo.
Hola Oscar
EliminarUn cometario bien acertado, creo que siempre nos movemos entre el "bien y el mal", entre la "luz y la sombra", pero es que así somos y aun así intentamos ser felices.
Gracias por tu visita, tu lectura y tu compartir que da vida a mi pequeño blog.
Un saludo de sábado